Edgar Allan Poe nació en 1809 en Boston y murió 40 años después en Massachusetts. Fue un crítico literario, un editor, autor pero es mejor conocido como poeta. Sus obras suelen suceder en las sombras, son oscuras, macabras y misteriosas. Hay un aura de depresión alrededor de ellas. Sin embargo, no son así porque fueran atractivas, sino porque son una mimesis de la vida del artista. La expresión artística de esta persona es reconocida por todos y respetada por su directa y surreal veracidad de lo intrínseco. Es como si sus historias estuvieran inspiradas en sus pesadillas y cuya esencia irracional, insana y extravagante, fueran fácilmente digeribles por las masas.
Su trabajo e influencia ha sido tal, que muchos han llevado las interpretaciones de los cuentos de Poe a la pantalla. Cultura Colectiva te presenta 4 cortometrajes animados de las historias de Edgar Allan Poe.
Vincent (1982) dirigido por Tim Burton
Este cortometraje animado hace referencia a ciertas partes de “El Cuervo”, uno de los cuentos más reconocidos de Edgar Allan Poe y nos incita a pensar en las intenciones ocultas de éste. Tim Burton nos recuerda su estilo y nos muestra las bases fundadoras de éste que ahora vemos en sus trabajos. El diseño sonoro, el arduo trabajo de stop motion y la historia hacen una tripleta perfecta, fantástica y abrumadora. Eso sin contar la narración de Vincent Price, actor fanático de Poe e inspiración para Tim Burton. Este fue el segundo filme de terror hecho por Disney.
The Raven en Los Simpsons
La relevancia de Edgar Allan Poe a más de 60 años de su muerte alcanza la cultura Pop en diferentes medios. Ha habido cameos de él en trabajos de Frank Capra, de Dostoievsky, y también en material más conocido como South Park. En el vídeo anterior, podemos apreciar su cuento más famoso en un capítulo especial de Los Simpsons. La narrativa del cuento se ajusta al estilo moderno e hilarante de la caricatura con la ayuda de un buen sonido y un gran montaje dándole un toque satírico. Esta animación refleja la relevancia y trascendencia de un gran escritor.
The Tell Tale Heart (1953) dirigido por Ted Parmelee
Producido por Columbia y narrado por James Mason, este cuento de Poe se ve hermosamente retratado en casi 8 minutos. Esta fue la primera animación que no tenía ninguna clasificación; es decir que no podría decirse si era para niños, adolescentes o adultos. No cabe duda que la esencia del arte de Allan Poe se ve respetado por los realizadores. Las penumbras, el estilo del dibujo, la música y las transiciones hechas en edición son crucialmente eficaces para contar la historia. Además, la premisa y el final de esta animación son muy congruentes consigo mismas y embonan a la perfección con el contexto, los colores, y el fin narrativo.
The Raven (2010) dirigido por Mariano Cattaneo & Nic Loreti
Esta corta animación, con sus movimientos de cámara, música, efectos sonoros y producción nos deja notar que es un trabajo contemporáneo. No dista mucho de los otros ejemplos, sin embargo, si uno presta atención puede notar que los recursos usados en 2010 dan una connotación diferente a la historia de Allan Poe. La historia está narrada por Billy Drago; la combinación de su voz empalmada con tan extravagante personaje y el contexto visual que lo envuelve evocan un gran mensaje y abren los ojos a una nueva perspectiva para recibir el cuento.
Los cuentos de este gran escritor son un pilar de la literatura. Es bien sabido que la mejor película es la que nos contamos a nosotros mismos, es lo que hacemos cuando leemos a Poe o a algún otro escritor. Sin embargo, con la ayuda de recursos tecnológicos y audiovisuales, las historias de este artista pueden cobrar nuevas luces y nuevos tonos cuando son contadas por otro medio. Los artistas encargados de llevarlo a cabo jamás entorpecieron las ideas de Edgar Allan Poe, al contrario, las embellecen.
FUENTE: culturacolectiva
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